Los Ostioneros de Guaymas, después de haber tenido una muy buena temporada el 82-83, que por cierto, fue el mejor equipo de la Liga dentro del rol regular y que fueron eliminados en el primero de los Plays Offs, por los Potros de Tijuana. Raúl Cano que era el manager del equipo realizó tremendo trabajo, tan así que repitió para el 83-84.
Por cierto que en la temporada 1983-1984, la organización de los Ostioneros de Guaymas pasó a ser propiedad del Sr. Ramón Ramírez Q. (QEPD)
Entre otras cosas la Liga ya había autorizado el regreso de los extranjeros ante el júbilo de la fanaticada, porque de cierta forma se alejaron un poco de los estadios, ellos querían a los “blondies”, la temporada dio inicio el 4 de octubre de 1983. Como un reconocimiento la Liga le rindió un homenaje a Don Agustin de Valdez, llevando su nombre esa temporada a uno de los grandes cronistas de béisbol de la Liga de la Costa del Pacífico y la nueva liga, todo un maestro en la narración.
El aforo del Estadio Abelardo L. Rodríguez, contaba con un aforo de aproximadamente 6.000 aficionados debidamente sentados, se impuso un record a nivel liga, se vendieron la misma cantidad de tarjetas de abono, por cierto la taquilla no era la gran cosa, la venta en taquilla era de 50 a 100 boletos por juego, recibimos mucho apoyo por parte de la afición de Guaymas.
Fue una magnífica temporada, el equipo lució bastante, Cano realizó un gran trabajo, se llegó a la final ante los Cañeros de Los Mochis.
Se contó con un gran equipo, en esa temporada Guaymas contó con los siguientes jugadores: Arturo Orozco, Obed Plascencia, Juan José Pineda, Alonso Tellez, Raúl Sánchez, Guillermo “Tiburón” Rodríguez, J.J. Bellacetin, Sid Monge, Jorge Luis “Trailero” Garcia, Kent Angulo, Jesús Reynoso, Eleno Cuén, “Conejo” Díaz. Angel Hernández, Roberto Verdugo, Edward Myers, Erik Barry, Jim Wilson, Matías Carrillo, “Walo” Rivera, Mike Sodders, James Randall, Bob Smith, Tom Dodd, Reggie West, Kent Thrower y Julio Alfonso Montiel.
Los Plays offs dieron inicio el día primero de enero de 1984 entre los equipos Tijuana, Hermosillo, Guaymas, Obregón, Navojoa, Mochis, Culiacán y Mazatlán.
Obregón eliminó a Hermosillo y Guaymas a Tijuana en la Zona Norte, en tanto que en la zona Sur, Culiacán eliminó a Mazatlán y Los Mochis a Navojoa.
En las semifinales Guaymas eliminó a Cd. Obregón y Los Mochis a Culiacán.
Y llegó la gran final por el campeonato, Cañeros de Los Mochis contra los Ostioneros de Guaymas. En el primer juego los Ostioneros de Guaymas derrotaron a los Cañeros 1 por 0. En el segundo partido los Cañeros empataron la serie al ganar 8 por 2. Y ya para el 24 de enero la serie se trasladó al Estadio Abelardo L. Rodríguez, alzándose con la victoria los Ostioneros de Guaymas por pizarra de 8 por 2 y a la noche siguiente Los Mochis derrotó a los Ostioneros por 3 a 2 y el día 26 de enero último juego a celebrarse en casa de los ostioneros, nuevamente los del puerto fueron derrotados por 8 por 2.
Y la hora esperada para todos para que el día 28 de enero, los cañeros se coronaron campeones al derrotar en 12 entradas 1 por 0 en tremendo juego a los Ostioneros de Guaymas.
En aquella noche inolvidable para la afición de Los Mochis fue cuando el “Wenchy” Ramírez entró de emergente con las bases llenas y con un solo out, conectando un batazo que techó al jardinero izquierdo, para así de esta manera enviar a la goma a Alvin Moore con la carrera que le daba el campeonato a los Cañeros ante los lanzamientos del gran Vicente “Huevo” Romo
A manera de comentario en esa final influyeron mucho Jaime Granillo y Memo Valenzuela, realizaron ambos un tremendo trabajo cuando fueron requeridos en sus relevos, los efectuaron de maravilla. Honor a quien Honor merece. bien ganado, bien perdido.
Como un comentario curioso, durante la final da los seis juegos que se llevaron a cabo, hubo tres encuentros en dónde el score fue similar de 8 por 2.
Durante la temporada regular al regresar los extranjeros después de la mexicanización, dominaron en el bateo, resultando campeón bateador el norteamericano Jim Collins de los Venados de Mazatlán con un promedio .314. Y en carreras producidas también Jim Collins fue el líder con 46. Y en cuadrangulares Chuck Canady de los Cañeros de Los Mochis conectó 14 siendo el señoron en la Liga.
Y en el pitcheo dominaron los mexicanos, primero en ganados y perdidos fuel el zurdo Alfonso Pulido de los Cañeros de Los Mochis con un record de 7 ganados por uno perdido. Y en efectividad Ramón Villegas de los Mayos de Navojoa con un bajísimo 1.10. Y en ponches resultó líder Vicente Romo de los Tomateros de Culiacán con 100.
COMENTARIO
¿Cómo se evalúa un talento? No hay una respuesta única para ello. Tomemos como ejemplo a Mike Piazza. Es seguro que en su carrera en el béisbol se distinguió como un tremendo cátcher y que en su carrera jugó para los Dodgers de los Angeles, Marlins de la Florida, Mets de Nueva York, Padres de San Diego y Atléticos de Oakland y el 6 de enero fue electo al Salón de la Fama de Cooperstown con más del 83% de los votos. Y aún así, cuando llegó al equipo dentro del draft de junio, nadie pareció quererlo. Cientos de jugadores fueron elegidos antes de que los Dodgers se dicidieran por Piazza y cuando lo hicieron, fue porque era ahijado del manager Tommy Lasorda. Si juzgar el talento fuera sencillo, probablemente Piazza hubiera sido el primer draft.