Mis respetos amigas y amigos. Luego de ver como un lanzador más recibe un pelotazo en la cabeza, hablamos de Juan Carlos Ramírez, picher de Tomateros de Culiacán de la Liga Arco Mexicana del Pacífico. Pareciera que el béisbol espera un deceso de algún lanzador para tomar medidas de seguridad serias en favor de los pichers.
Lo decimos porque hasta que un coach de base, ¿lo recuerdan?, Mike Coolbaugh, en el béisbol de las menores en el año 2007, hasta ese entonces ingresó la regla de los coaches de base deberían utilizar casco.

Ha habido pichers golpeados por una pelota bateada mientras lanzan con múltiples fracturas en su rostro, que han perdido un ojo, o han perdido su carrera por el daño psicológico que esto les ocasiona; pero no ha habido decesos. Esperamos entonces a que haya un deceso para que el béisbol tome medidas.
Lo mismo pasó con el uso de esteroides anabólicos. Era un secreto a voces el uso de estas sustancias en el béisbol. El béisbol se hacía de la vista gorda. José Canseco “los ventaneo” con su famoso libro y ahora si entraron las restricciones.
Por cierto, también en el robo señales de los Astros de Houston con el uso de la tecnología. Los reportes indicaban que no eran los únicos, Yankees, Medias Rojas, entre otros tenían sus técnicas para robar señales. Un lanzador, Mike Fiers, que estuvo con los Astros del 2017, reveló la trampa y hasta entonces MLB reaccionó.
Gracias a Dios Juan Carlos Ramírez, lanzador de Tomateros de Culiacán, se repone en un hospital de Hermosillo, Sonora, del pelotazo que recibió en la cabeza, luego de la línea bateada por Adison Russell, al parecer no hubo daño mayor más que el susto.
El deseo, con la ayuda de Dios es que su recuperación siga viento en popa. Y luego de eso, esperemos que muera un picher de un pelotazo en la cabeza para que se tomen medidas de seguridad.
¿Qué medidas?, el uso del casco ha ayudado en el béisbol ¿no? No quiero imaginar la cantidad de bateadores que habría con severos daños si el béisbol se jugara sin este aditamento.
Que es incómodo para los pichers lanzar con un casco. Imagino que debe de ser más incómodo ver como los pichers quedan inertes en el terreno de juego luego de un pelotazo o pasan semanas recuperándose; o nunca se recuperan.
Además, de no creerse. En Estados Unidos que tanto presumen los aparatos que mandan a quién sabe que Galaxia y no poder fabricar un casco “más cómodo” para lanzadores.
Entonces, “mejor”, esperamos un deceso de algún lanzador por un pelotazo en la cabeza, para tomar medidas.
Gracias y como siempre mis respetos.