PRENSA ALGODONEROS (Nota: Rubén Benítez. Fotos: Cortesía. Producción: Algodoneros)
GUASAVE.- ¡La espera terminó! A poco más de un mes de dejar vacante el puesto de mánager, Algodoneros de Guasave hizo un trabajo rápido de evaluación de candidatos, y se inclinó por traer a un hombre con amplia experiencia en el beisbol, como lo es el colombiano Jolbert Cabrera.
Con esto, queda cubierto el puesto de estratega con una persona ideal, ya que Cabrera jugó 22 años pelota profesional, incluyendo Grandes Ligas y una temporada con Algodoneros de Guasave, la cual le fue muy benéfica, porque le ayudó a regresar al mejor beisbol del mundo.
“Me siento muy orgulloso de que me hayan elegido para ser el mánager de Algodoneros, y más porque tengo bonitos recuerdos de la ciudad, así es que vamos a trabajar fuerte para no defraudar la confianza que me da la directiva encabezada por el licenciado Alfredo (Arámburo) y Álex (Ahumada), con quien tengo una excelente relación desde que jugamos en Campeche en el 2011”, dijo Cabrera.
Su carrera profesional comenzó en 1991 con la organización de Expos de Montreal, para luego comenzar un trajinar que lo llevó a estar ocho temporadas en Grandes Ligas, además de su participación con Algodoneros en la temporada 2007-2008, en la que en 56 juegos bateó .305 con tres obuses y 19 carreras impulsadas.
Esa temporada le ayudó a regresar a lo que sería su última incursión en Grandes Ligas, la cual fue en el mismo 2008 con Rojos de Cincinnati.
“Estoy motivado por regresar a Guasave, porque la última vez que estuve ahí, esa oportunidad me ayudó a volver a Grandes Ligas, entonces, por qué no, aspirar a llegar a al máximo nivel de manera permanente como instructor, después de la experiencia que estoy por vivir nuevamente con Guasave.
Su carrera profesional comenzó en 1991 con la organización de Expos de Montreal, para luego comenzar un trajinar que lo llevó a estar ocho temporadas en Grandes Ligas, además de su participación con Algodoneros en la temporada 2007-2008, en la que en 56 juegos bateó .305 con tres obuses y 19 carreras impulsadas.
Esa temporada le ayudó a regresar a lo que sería su última incursión en Grandes Ligas, la cual fue en el mismo 2008 con Rojos de Cincinnati.